¡En shock! Así quedó Amanda Díaz luego de tener que hacer una aclaración que jamás pensó necesaria. Tras compartir que “perdió una batalla” al tener que quitarse su piercing de embarazada por una leve irritación, varios de sus fans le enviaron mensajes asegurando que sí “es malo” usar ese tipo de accesorios porque su bebé se alimenta a través de su ombligo.
En sus historias de Instagram, la “influencer” y presentadora de televisión no se quedó callada y desmintió los comentarios que llegaron a sus mensajes directos en Instagram.
“¡Yo no puedo creer que hay gente que me está peleando a las 9 de la mañana que yo no estoy dejando vivir a mi hijo porque yo tengo un piercing en el ombligo!”, comentó, aclarando que “…el bebé no come a través de mi ombligo. No, mi ombligo es mi ombligo, no tiene nada que ver con el bebé. El bebé come a través de su ombligo porque el cordón umbilical va hacia el ombligo del bebé; que yo tengo un piercing en mi ombligo no significa que le estoy haciendo un daño al ‘pelaito’”, agregó.
“Que yo me tatúe mi ombligo no significa que el ‘pelaito’ está tatuado, él tiene su propio ombligo y él come por su ombligo”, cerró.
El tener un piercing en el ombligo no supone un riesgo directamente para el bebé, pero si se desgarra el orificio del piercing puede, al distenderse el abdomen, favorecer las infecciones cutáneas en la madre.